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Por qué deberías priorizar el empoderamiento de los empleados

Foto de la colaboradora - Caeleigh MacNeilCaeleigh MacNeil
29 de febrero de 2024
9 min de lectura
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Plantillas

Resumen

El empoderamiento de los empleados es mucho más que una palabra de moda, es la clave para crear un equipo productivo y feliz. Descubre por qué el empoderamiento es realmente indispensable. Además, prueba cinco estrategias concretas para brindarle a tu equipo el apoyo, la capacidad de acción y la confianza que necesitan para prosperar en el trabajo.

Piensa en la última vez que lograste algo sin la ayuda de nadie. Puedes haber aprendido a arreglar tu PC, a ocuparte de tus impuestos o a tocar un instrumento. Seguramente te habrás enfrentado a obstáculos en el camino, pero contabas con las herramientas necesarias para hacerles frente. ¿Te sentiste bien, no?

De eso se trata cuando hablamos de empoderamiento de los empleados. Cuando los trabajadores se sienten empoderados, tienen las herramientas y confían en que pueden tomar decisiones importantes y resolver las cosas solos. Cada vez que superan un inconveniente, sienten que tienen más experiencia, más confianza en sí mismos y se sienten más poderosos como para generar un impacto positivo.

¿Qué es el empoderamiento de los empleados?

El empoderamiento de los empleados es la práctica de respaldar a los miembros del equipo y de ofrecerles el espacio necesario para que desarrollen todo su potencial en el trabajo. Los líderes que empoderan a sus empleados se centran más en respaldarlos que en hacer microgestión. Les brindan la confianza y las herramientas que necesitan para superar cualquier inconveniente, además de darles la autonomía necesaria para que puedan tomar sus propias decisiones. El resultado es que los trabajadores empoderados pueden mejorar sus habilidades, responsabilizarse por sus trabajos y ganar confianza para marcar la diferencia.

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Por qué deberías priorizar el empoderamiento de los empleados

El empoderamiento de los empleados ayuda a que cada miembro del equipo despliegue su mayor potencial en el trabajo. Lo que, en consecuencia, hará que tu equipo y tu empresa también prosperen. A continuación, te mostramos qué puedes hacer para empoderar a tu equipo:

  • Ofréceles a los empleados el respaldo que necesitan para manejarse ante los desafíos que se presenten: El empoderamiento de los empleados se centra en ofrecer a los trabajadores la confianza, las herramientas y la información que necesitan para tomar decisiones difíciles. Con tu apoyo y los recursos adecuados, el equipo puede aprender de la experiencia, pero sin sentir que lo han arrojado al vacío. Con el tiempo, también sirve para que los empleados no solo ganen experiencia sino, además, confianza. Cuando se sienten mejor en sus trabajos, puedes confiar en que podrán gestionar proyectos cada vez más complicados.

  • Incentiva la participación de los empleados: Los empleados empoderados tienen más probabilidades de ser participativos y de sentirse comprometidos con su trabajo. Lo respaldan los datos de estudios que demuestran que el percentil de participación en el que se encuentran los empleados empoderados es de 79, mientras que el resto de los empleados que no se sienten empoderados se encuentran en un percentil de 24. Y estos números tienen sentido si uno lo piensa. No es nada fácil sentirse comprometido y participar cuando no tienes el control de lo que haces. Al empoderar a los empleados, les das más control y autonomía para generar impactos reales.

  • Genera una cultura corporativa sólida: La cultura de tu organización es el reflejo de tus valores. Si le otorgas al empoderamiento el valor y la importancia que tiene, incentivas a los empleados a asumir sus responsabilidades y producir trabajos de los que se sientan orgullosos. Este tipo de cultura es mucho más sólida que aquellas en las que los trabajadores se sienten incapaces de hacer cambios. Además, una cultura corporativa positiva ayuda a generar bienestar y satisfacción entre los empleados. Es decir, la retención de empleados es mayor, hay menos rotación y el desempeño laboral mejora.

  • Produce trabajos de excelente calidad: El empoderamiento de los empleados otorga a los mejores trabajadores las herramientas y los recursos que necesitan para lograr productos de excelencia. Les permite asumir por completo la responsabilidad de los proyectos; entonces, tienen menos obstáculos y están mejor dispuestos para producir resultados de alta calidad.

  • Toma mejores decisiones, más rápido: Los empleados empoderados tienen la capacidad de acción, el contexto y la claridad que necesitan para tomar buenas decisiones, rápido. Saben qué decisiones pueden tomar y cuáles deberían tomar los líderes. Es el motivo por el que pueden actuar rápidamente cuando detectan algo que está fuera de su incumbencia. Cuando sí lo está, no tienen que esperar a que intervenga alguien de más arriba, que no está familiarizado con el problema en cuestión. En cambio, el poder de tomar la decisión recae en quienes tienen una perspectiva concreta y detallada.

  • Contrata (y conserva) a los mejores talentos: Un entorno de trabajo en que los empleados se sienten empoderados es atractivo para potenciales candidatos. El motivo es que a los mejores candidatos les entusiasma la idea de poder responsabilizarse por lo que hacen e influir en los resultados de la empresa. Las personas talentosas quieren aportar toda su capacidad, y una cultura de empoderamiento les permite hacerlo. Es decir, los empleados talentosos tendrán una mayor satisfacción en sus puestos de trabajo y permanecerán por más tiempo. Todo gracias al empoderamiento. 

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5 maneras de formar un equipo empoderado

Bien, el empoderamiento de los empleados es realmente indispensable, pero ¿por dónde empezar? A continuación, compartimos cinco opciones concretas para favorecer el empoderamiento en tu equipo.

1. Distribuye las responsabilidades

En esencia, el empoderamiento de los empleados se reduce a una cosa: brindarles a los miembros del equipo la autoridad y los recursos necesarios para que tomen sus propias decisiones. Es decir, para que el empoderamiento funcione, debes delegar y distribuir las responsabilidades entre tu equipo. Al mismo tiempo, también es indispensable que garantices el contexto necesario para tomar decisiones correctas.

Cuando distribuyes las responsabilidades, las decisiones no recaen solamente sobre tu espalda. En cambio, puedes empoderar a tus empleados para que asuman la responsabilidad de sus proyectos. Aún puedes ofrecer tus comentarios, pero a la larga, la decisión será de cada uno.

Estudio de caso: distribución de las responsabilidades en Asana

En Asana, empoderamos a los empleados con la creación de áreas de responsabilidad (AoR). Para un sector dado de la empresa (como el de Comunicaciones Internas, Recursos Humanos u Operaciones de Marketing) hay un supervisor de AoR. Será quien preste atención a los comentarios de los demás participantes. Ahora, en caso de que las opiniones estén muy divididas o no haya respuestas claras, la decisión seguirá siendo de cada persona. La clave de implementar el AoR es ofrecer claridad sobre de qué es responsable cada miembro del equipo (y de qué no lo es). De este modo, siempre sabrás quién tiene el poder de decisión en una situación dada.

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En Asana, aspiramos a lograr un nivel inusual de empoderamiento, en el que cada uno contribuya de manera autónoma a la misión de la empresa.”
Justin Rosenstein, cofundador de Asana

Por ejemplo, imagínate que lideras un equipo de marketing por email conformado por tres personas. Los roles de los empleados son similares, escriben, preparan y entregan contenido para los boletines por email. Pero más allá de ese rol de base, cada uno es responsable de un área diferente de trabajo:

  • Plataforma de marketing por email: trabaja con el equipo de ingeniería para reparar errores y mejorar funciones.

  • Pruebas: trabaja con el equipo de análisis para probar el desempeño de diferentes funciones del boletín.

  • Sociedades para contenido: trabaja con el equipo de contenido para adaptar textos ya producidos al boletín.

Cada empleado tiene la responsabilidad y el poder de tomar decisiones en sus propias áreas específicas. Como resultado, se les permite actuar de forma autónoma con total libertad y están empoderados para generar cambios verdaderos.

2. Brinda los recursos necesarios para tomar decisiones

Tomar decisiones puede ser aterrador. Es decir, el empoderamiento de los empleados no solo le otorga al equipo más poder para que se tomen las decisiones sino que además, brinda el apoyo y los recursos necesarios para sentir la confianza suficiente en sus elecciones.

Que alguien sea responsable de una decisión no significa que tenga que tomarla solo. Aquí te mostramos cómo respaldar a los integrantes de tu equipo y ayudarlos a tomar las mejores decisiones posibles:

  • Aclara cuáles son los diferentes tipos de decisiones. Para tomar algunas decisiones se necesita mucha planificación, mientras que para otras, basta con un poco de tiempo. Según Jeff Bezos, puedes hacer una clara división entre dos categorías: la tipo uno y la tipo dos. Las decisiones de tipo uno son aquellas casi irreversibles y que tienen un gran impacto, como contratar a un empleado nuevo para el equipo o abrir una oficina nueva. Las de tipo dos, son aquellas fáciles de revertir, con un impacto relativamente leve, como elegir un día para la reunión semanal del equipo. Si distingues entre estos dos tipos de decisiones, puedes avanzar más rápido y evitar perder demasiado tiempo en elecciones de menor impacto.

  • Usa un marco para tomar decisiones. Con un marco de decisiones se proyecta cada etapa del proceso de toma de decisiones y te ayuda a identificar quién es responsable de cada paso. Una de las opciones es el marco RAPID®, con el que se identifican cinco roles esenciales para las decisiones más importantes, los de: recomendar (Recommend), acordar (Agree), actuar (Perform), aportar (Input) y decidir (Decide). En algunas empresas se usa un solo marco universal para todas las grandes decisiones. Si en la tuya no sucede esto, analiza la posibilidad de utilizar un proceso estandarizado de toma de decisiones en tu equipo. De este modo, podrás asegurarte de que todos sigan los mismos pasos y tomen decisiones de alta calidad.

  • Crea gráficos RACI. En un gráfico RACI se indica quién es Responsable, Aprobador, Consultado e Informado para un proyecto específico. Aclara quién es responsable de tomar y aprobar las decisiones, a quién se debería consultar antes de implementarlas y quién debería ser informado acerca del resultado final. Si incentivas a los miembros de tu equipo para que generen gráficos RACI para cada proyecto nuevo, puedes empoderarlos para que trabajen en relación con todas las partes interesadas y se aseguren de incluir a las personas correctas en las decisiones clave.

  • Sé la caja de resonancia. Como gerente, te encuentras en la mejor posición para acompañar y guiar a tu equipo cuando deben hacer elecciones complicadas. Tómate algo de tiempo durante las reuniones individuales para hablar sobre los problemas y las posibles soluciones. Oriéntalos siempre que puedas, pero recuerda que la decisión final es de ellos.

  • Establece las expectativas. Las decisiones pueden ser intimidantes, en particular cuando tienen consecuencias de largo alcance. Para evitar la parálisis ante las decisiones, aclara que las buenas decisiones están más vinculadas al proceso que a los resultados. No puedes predecir el futuro, pero sí puedes seguir un proceso sólido de toma de decisiones y aumentar las probabilidades de éxito. Si dejas en claro las expectativas, ayudas a que los empleados actúen, incluso aunque puedan fallar. 

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Lo que hace que una decisión haya sido excelente no es un resultado perfecto. Una buena decisión es el resultado de un buen proceso.”
Annie Duke, exjugadora profesional de póker, escritora y consultora para toma de decisiones

3. Conecta el trabajo diario con los objetivos

Para priorizar el trabajo y tomar buenas decisiones, debes saber qué es importante. Para eso están los objetivos, son el “norte” que guía a los empleados entre las diferentes opciones, como con qué hay que trabajar primero, cuándo conviene posponer solicitudes de otras partes interesadas o si conviene o no trabajar con un proyecto nuevo.

Cuando los empleados entienden cómo su trabajo contribuye a los objetivos de la empresa, saben lo que es importante para el negocio y en qué deberían centrarse. Esta claridad ofrece a los miembros del equipo una mayor autonomía para tomar sus propias decisiones, mientras que a la vez garantiza que se mantengan alineados con los objetivos de la empresa.

Una opción para relacionar el trabajo diario con los objetivos es mediante objetivos y resultados clave (OKR). Una metodología que combina los objetivos con las métricas que se utilizarán para dar seguimiento al progreso. En Asana, el equipo ejecutivo determina los objetivos de negocios, pero cada equipo individualmente decide los resultados clave que prefiere perseguir. Luego, cada miembro del equipo establece sus propios resultados clave personales alineados con los resultados clave (KR) de todo el equipo.

Lee: Cómo establecer objetivos ambiciosos y darles seguimiento para inspirar a tu equipo

4. Aplica el liderazgo democrático

La palabra democracia parece implicar que nos referimos a algo “regido por el pueblo”. En ese sentido, el liderazgo democrático es un estilo de gestión que incentiva la participación de los miembros del equipo en el proceso de toma de decisiones. Como gerente, significa que no tomas las decisiones por cuenta propia y las comunicas a tu equipo. En cambio, pides la opinión del equipo y usas esa información para tomar las decisiones.

Esta estrategia puede resultar más lenta que la de tomar las decisiones solo, pero es una forma, basada en información, de incentivar la participación en los equipos y de favorecer el empoderamiento de los empleados. Un empleado que siente escuchado tiene 4.6 veces más probabilidades de sentirse empoderado para realizar un trabajo de gran calidad. Y una de las mejores maneras de ayudar a los integrantes de tu equipo a sentirse escuchado consiste en pedirles que compartan sus ideas, opiniones y consejos.

Lee: 11 estilos de liderazgo comunes y cómo encontrar el tuyo

5. Da, recibe y actúa con los comentarios

Dar y recibir comentarios puede ser un proceso incómodo, pero esencial para ayudar a que tus empleados se sientan empoderados en el trabajo. El motivo es que gran parte del empoderamiento se basa en la confianza. Debes confiar en que tus empleados actuarán por sí solos y ellos deberán confiar en que les dirás si pueden hacer algo mejor.

Nadie quiere trabajar mal. Del mismo modo en que quisieras que un amigo te avisara si tienes lechuga entre los dientes, todos queremos que nos digan si erramos el camino en el trabajo. Los comentarios honestos demuestran que tu equipo puede confiar en que dirás lo que piensas y que les darás las oportunidades que necesitan para aprender. Y cuando recibas los comentarios de los demás empleados y actúes, demostrarás que su perspectiva importa. No solo ayuda a generar buenos vínculos y confianza, también incentiva a los miembros del equipo a hablar y a defender lo que necesitan.

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Confianza es creer en la capacidad de una persona para sobresalir en el trabajo, no pensar que ya es perfecta. Con comentarios amables y directos de colegas es como mejora la gente en sus trabajos y, a la larga, son dignos de más confianza.”
Justin Rosenstein, cofundador de Asana

Mayor claridad = mayor empoderamiento

En definitiva, el empoderamiento del equipo se basa en la confianza y la claridad. Debes confiar en que los miembros del equipo trabajarán con autonomía y tomarán sus propias decisiones, y, a la vez, deberás garantizar que cuenten con el conocimiento y los recursos necesarios para tener éxito.

Si el software para la gestión de proyectos es el adecuado, puede resultar sumamente útil para el empoderamiento de los empleados. Con una herramienta como Asana, tu equipo puede tener una idea clara de cómo progresan los proyectos, quién es responsable de qué y qué decisiones se deben tomar. Puedes empoderar a los miembros del equipo para que trabajen con autonomía y sigan conectados con todo lo que sucede.

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